San Alejandro de Alejandría
Se recuerda a san Alejandro especialmente por el gran papel que tuvo en su oposición al hereje Arrio. Fue, además, guía de un campeón de la ortodoxia como san Atanasio
Santos Luis Versiglia y Calixto Caravario
Salesianos, ambos estaban muy vinculados al carisma de san Juan Bosco y sufrieron el martirio en China
San Ethelberto
Rey de Kent, criado en el paganismo, fue el primer soberano inglés en convertirse al cristianismo
San Policarpo
Fue discípulo de san Juan Evangelista, que lo consagró obispo de Esmirna. Se le tenía en gran estima por su doctrina teológica y fue maestro de san Ireneo de Lyon, también él nativo de Esmirna
Cátedra de San Pedro
La fiesta de la Cátedra de San Pedro tiene orígenes muy antiguos. La «cátedra», del latín cathedra, indica el lugar donde se sienta el obispo, incluido el Santo Padre, obispo de Roma, es decir, la ciudad donde Pedro sufrió el martirio
San Pedro Damián
En su doctrina teológica, que le valdrá ser proclamado Doctor de la Iglesia en 1828, exaltaba la importancia de la sancta simplicitas
Santos Jacinta y Francisco Marto
La Iglesia ha fijado el 20 de febrero para celebrar la memoria litúrgica de ambos pastorcillos, los primeros niños no mártires que fueron proclamados santos
Santa Lucía Yi Zhenmei
Esta ejemplar catequista china, que sufrió el martirio a los 47 años, había manifestado desde muy joven sus virtudes. Atraída por el ejemplo de las religiosas misioneras, a los 12 años ofreció su virginidad a Dios
Santa Gertrudis Comensoli
Fundó el Instituto de las Religiosas Sacramentinas, nacido por su amor a Jesús y consagrado a la adoración perpetua del Santísimo Sacramento
Santos siete fundadores
En 1233 fundaron la Orden de los Siervos de María, que debe su nacimiento a la acción directa de la Santísima Virgen
Santa Juliana de Nicomedia
Sufrió el martirio durante la Gran persecución (303-305) ordenada por el emperador Diocleciano
San Claudio de la Colombière
Se dedicó incansablemente, tanto por escrito como verbalmente, a difundir la devoción al Sagrado Corazón de Jesús