Santa Olimpia
Las diecisiete cartas que san Juan Crisóstomo le escribió desde el exilio dan testimonio de la estima de la que gozaba en la comunidad cristiana santa Olimpia (361-408), perseguida a su vez
Santa Adelaida
Reina, emperatriz y, sobre todo, santa. En efecto, hubo muchas etapas importantes en la vida de Adelaida de Borgoña (931-999), pero su denominador común se encuentra en su reputación de cristiana ejemplar
Santa María Crocifissa Di Rosa
Fundadora de las Siervas de la Caridad, se preocupó siempre de transmitir a todas sus hijas en Cristo la centralidad de la adoración eucarística. Fue ella, según el testimonio de Pierina Gilli (1911-1991), quien se apareció a la vidente de Montichiari, concediéndole su curación. Y de nuevo María Crocifissa, el 24 de noviembre de 1946, como lo haría varias veces después, actuó como guía de Pierina en la primera aparición de María Rosa Mística
San Juan de la Cruz
Reconocido como "el más santo de los poetas y el más poeta de los santos" y llamado Doctor Mysticus, san Juan de la Cruz (1542-1591) no sólo nos transmitió una doctrina mística iluminadora, sino que al mismo tiempo fue un hombre muy concreto, que apoyó a santa Teresa de Ávila en la reforma del Carmelo.
Santa Lucía
Modelo de pura fidelidad a Cristo hasta su glorioso martirio, santa Lucía († 13 de diciembre de 304) es una de las figuras más queridas de la piedad cristiana, ejemplo para los fieles en su camino hacia Dios y fuente de inspiración para artistas y escritores
Nuestra Señora de Guadalupe
La devoción a Nuestra Señora de Guadalupe nació de las apariciones de 1531 al indio Juan Diego Cuauhtlatoatzin, de las cuales queda un signo tangible en la imagen milagrosa de la Santísima Virgen, sometida a diversos análisis científicos y que todavía se conserva en el santuario dedicado a Ella
San Dámaso I
Gobernó la Iglesia en una fase en la que las herejías se abatieron sobre la Divina Trinidad, contra las que luchó enérgicamente con la ayuda, entre otros, de san Jerónimo, al que encargó traducir la Biblia al latín
Beata Virgen María de Loreto
Hoy recordamos la traslación de la Santa Casa de Nazaret que el 10 de diciembre de 1294 fue llevada por ángeles en el territorio de las Marcas (Italia), entonces parte del Estado Pontificio. No fue la primera traslación milagrosa ni sería la última... Desde el siglo XIII hasta nuestros días se han realizado numerosos estudios arqueológicos e históricos sobre la Santa Casa tanto en Loreto como en Nazaret, estudios que avalan la sobrenaturalidad de la traslación
San Juan Diego Cuauhtlatoatzin
El sábado 9 de diciembre de 1531 por la mañana, la Santísima Virgen se apareció al campesino Juan Diego Cuauhtlatoatzin (1474-1548) en el cerro del Tepeyac, cerca de la Ciudad de México, presentándose como “la perfecta Virgen María, Madre del Dios verdadero y único”. Así comenzó la extraordinaria historia de Nuestra Señora de Guadalupe
Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María
El origen inmaculado de la Santísima Virgen “había sido predestinado en el único e idéntico decreto de la Encarnación de la Divina Sabiduría” (Ineffabilis Deus), porque Dios quiso desde la eternidad que María, la “llena de gracia” (Lc 1,28), fuera preservada de toda mancha de pecado para custodiar perfectamente en su seno al divino Hijo hecho hombre por obra del Espíritu Santo
San Ambrosio
Por su trabajo en la salvaguarda de la correcta doctrina que expuso en varios escritos, fue proclamado entre los primeros cuatro grandes doctores de la Iglesia, junto con Agustín, Jerónimo y Gregorio Magno. Insistió en el papel de la Virgen en la historia de la salvación, exhortando a los fieles a imitarla