San Federico de Utrecht
En el Martirologio Romano se recuerda que «brilló en el estudio de las Santas Escrituras y puso atención y empeño en la evangelización de los frisones».
San Alejo
Ha sido fuente de inspiración para escritores y artistas. Con el tiempo, han surgido varias versiones hagiográficas de su figura, que tienen en común un rasgo fundamental: la renuncia a todo para seguir a Dios
Nuestra Señora del Carmen
La fiesta de la Virgen del Carmen, vinculada a la historia muy particular de la Orden Carmelita, es una de las más queridas por la piedad cristiana...
San Buenaventura
Junto con el dominico santo Tomás de Aquino, su amigo, fue uno de los grandes protagonistas del pensamiento filosófico y teológico del siglo XIII, cuando la fe cristiana mostró toda su capacidad para incidir en la cultura
San Camilo de Lellis
San Camilo de Lellis - fundador de los Ministros de los Enfermos, conocidos comúnmente como Camilianos - es patron universal (con san Juan de Dios) de los enfermeros, los enfermos y los hospitales.
San Enrique II
Emperador del Sacro Imperio Romano y rey de Italia, junto con su esposa, santa Cunegunda, promovió la construcción de iglesias y monasterios, y contribuyó a la renovación de la Iglesia
Santos Nabor y Félix
Fueron dos soldados bereberes que abrazaron la fe cristiana después de llegar a Italia; ambos sufrieron el martirio bajo Diocleciano
San Benito de Nursia
Con su vida, al mismo tiempo glorificó al Creador y contribuyó de manera fundamental a la formación de la civilización europea
Santas Rufina y Segunda
Fueron dos hermanas y prometidas que pusieron a Dios en primer lugar, sufriendo el martirio durante las persecuciones de Valeriano
Santos mártires chinos
El calendario litúrgico de hoy conmemora el heroico testimonio de un gran número de mártires, que se hicieron imitadores de Cristo crucificado para proteger su don más grande, la fe
Santos Áquila y Priscila
Se encuentran entre los primeros grandes ejemplos de esposos cristianos. A los santos Áquila y Priscila se les conoce por el trabajo que realizaron en la Iglesia naciente y la gran ayuda brindada a san Pablo
San Panteno
Eusebio de Cesarea, en su Historia Eclesiástica, lo definió como «un hombre celebérrimo por su cultura»