San Ambrosio
Por su trabajo en la salvaguarda de la correcta doctrina que expuso en varios escritos, fue proclamado entre los primeros cuatro grandes doctores de la Iglesia, junto con Agustín, Jerónimo y Gregorio Magno. Insistió en el papel de la Virgen en la historia de la salvación, exhortando a los fieles a imitarla

San Nicolás de Bari
Fue obispo de Myra. A partir de la figura de San Nicolás, venerado entre otras cosas como protector de los niños, el mito de Santa Claus se ha desarrollado con el paso del tiempo. El nombre “de Bari”, por otra parte, se debe al traslado de la mayoría de las reliquias a la capital de Apulia en 1087


San Sabas de Capadocia
Sabas el Santificado o san Sabas de Capadocia (439-532), uno de los Padres del desierto, desempeñó un papel importante en la difusión del monaquismo oriental


San Juan Damasceno
Defendió el culto a las imágenes sagradas con una teología profunda que se basa en el fundamento de la fe cristiana: la Encarnación


San Francisco Javier
“Tan grande es la multitud de conversos que a menudo me duelen los brazos de tanto que han bautizado, y ya no tengo voz y fuerza para repetir el Credo y los mandamientos en su propio idioma”, escribió. En 1927 fue nombrado patrono de todas las misiones junto con santa Teresa de Lisieux y ya en el siglo XVIII había sido elegido como protector de todo Oriente


Santa Bibiana
El martirio de la joven virgen romana Bibiana se sitúa en el paréntesis histórico del imperio de Flavio Claudio Julián (361-363), llamado el Apóstata


San Edmondo Campion y compañeros
Nacido en Londres en los años cálidos del cisma anglicano, san Edmund Campion (1540-1581) se formó especialmente en Oxford, viviendo gran parte de su adolescencia durante el reinado de María I de Inglaterra (1553-1558), que intentó restaurar el catolicismo en su país...


San Andrés
De san Andrés se recuerda que era hermano de Simón Pedro, pero no siempre se recuerda otro detalle muy importante: fue el apóstol que llevó a Pedro al Señor...


San Francisco Antonio Fasani
Entró siendo adolescente en los franciscanos asumiendo el nombre religioso de los dos santos de la orden a los que era más devoto. Pasaba varias horas al día en el confesionario, exhortaba a la Comunión diaria e instilaba en los corazones el amor por la Eucaristía


San Jaime de la Marca
De la enseñanza y el carisma de san Bernardino nació su devoción hacia el Santísimo Nombre de Jesús. Jaime predicó sobre todo en lengua vernácula, tratando temas como la superstición, el lujo, el juego, la blasfemia y la usura. Para ayudar a las personas con dificultades económicas y liberarlas de los usureros, promovió los Montes de Piedad


Nuestra Señora de la Medalla milagrosa
No por casualidad, desde la Rue du Bac, se inició un excepcional ciclo de apariciones marianas, signo de la abundancia de gracias que ha coincidido con la intensificación de la batalla escatológica


San Leonardo de Puerto Mauricio
El primer mérito que se le atribuye a san Leonardo es la propagación del Vía Crucis en toda la Iglesia. Introdujo, además, las meditaciones para cada una de las 14 estaciones, enseñando que el Vía Crucis «es lo mismo que contemplar con ternura de corazón todos esos momentos de sufrimiento y dolor que, desde la casa de Pilato hasta el Calvario, sufrió bajo el peso de la Cruz el amadísimo Jesús, nuestro bien»

