San Luis Orione
«Sólo la caridad salvará al mundo», era el programa de vida de san Luis Orione (1872-1940), el fundador de la Pequeña Obra de la Divina Providencia, que ya en el nombre revela dos rasgos fundamentales del sacerdote piamontés: su humildad y su inquebrantable confianza en la actuación de Dios en la historia
San Sofronio de Jerusalén
Tuvo el grandísimo mérito de denunciar la herejía monotelita y permaneció con sus fieles durante la invasión islámica de la Ciudad Santa
San Macario de Jerusalén
Se le atribuye un papel importante en la redacción del Símbolo niceno, primer núcleo de nuestro Credo. Era obispo de Jerusalén cuando santa Elena encontró la Cruz de Cristo y, con la ayuda de la gracia, fue decisivo en identificarla
Santa Francisca Romana
Invocada contra las pestes y para la liberación de las almas del Purgatorio, enseñaba: «Que la finalidad de vuestra actividad sea siempre y únicamente la gloria de Dios»
San Juan de Dios
El santo, verdadero innovador de la asistencia hospitalaria y fundador de los Hermanos Hospitalarios, organizó el hospital en distintas secciones, separando a los ancianos abandonados y los distintos tipos de enfermos: con él nació el hospital moderno
Santas Perpetua y Felicidad
El culto a Felicidad y Perpetua se difundió immediatamente en toda la cristiandad y su dies natalis fue incluido en el Depositio martyrum, el antiguo calendario de la Iglesia de Roma, que se remonta al año 336
Santa Coleta de Corbie
Se debe a ella el nacimiento de la Orden de las clarisas llamadas «coletinas», que surgió de su deseo de volver a la austeridad original de la Regla de santa Clara
San Lucio I
San Lucio subió al solio pontificio en junio de 253, después de la muerte en el exilio del papa Cornelio, al que el emperador Treboniano Galo obligó a abandonar Roma. La Iglesia estaba atravesando una fase dificilísima...
San Casimiro
Al príncipe santo, patrono de Lituania y Polonia, le bastaron poco más de 25 años de vida para que su pueblo le amara
Santa Catalina Drexel
Varios decenios antes de que los reflectores del mundo se encendieran sobre los afroamericanos, santa Catalina Drexel (1858-1955) fue misionera en medio de ellos y de los nativos americanos, ocupándose de su educación y llevándoles el anuncio de Cristo
Santa Inés de Bohemia
Entre el emperador que la quería como esposa y el Rey del universo, santa Inés de Bohemia (1211-1282) no tuvo dudas, dado el ardiente amor que sentía por Dios
San Albino de Angers
Hizo de todo para ayudar a las personas en dificultad, por ejemplo liberando a los prisioneros tomados como rehenes por los piratas, o expulsando a los demonios