Fe y humildad
Encontraron al criado perfectamente sano (Lc 7, 10)
Alégrense conmigo
Habrá más alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta, que por noventa y nueve justos que no necesitan convertirse (Lc 15, 7)
Cada árbol se conoce por sus frutos
¿Por qué me dicen "Señor, Señor", y no hacen lo que yo les digo? (Lc 6, 46)
¿Por qué ves la paja en el ojo de tu hermano y no la viga que llevas en el tuyo?
¡Hipócrita! Saca primero la viga que llevas en tu ojo y entonces podrás ver (Lc 6, 42)
Cristo vino al mundo de la siguiente manera...
He aquí que la virgen concebirá y dará a luz un hijo
Felices ustedes...
¡Felices ustedes, los pobres, porque el Reino de Dios les pertenece! (Lc 6, 20)
La oración de Jesús
Jesús se retiró al monte a orar y se pasó la noche en oración con Dios (Lc 6, 12)
La pregunta
¿Qué es lo que está permitido hacer en sábado: el bien o el mal, salvar una vida o acabar con ella? (Lc 6, 9)
Si alguno quiere seguirme...
Cualquiera de ustedes que no renuncie a todos sus bienes, no puede ser mi discípulo (Lc 14, 33)
El sábado
El Hijo del hombre también es dueño del sábado (Lc 6, 5)
Vino nuevo en odres nuevos
¿Acaso pueden ustedes obligar a los invitados a una boda a que ayunen, mientras el esposo está con ellos? (Lc 5,34)
¡Apártate de mí, Señor, porque soy un pecador!
Llevaron las barcas a tierra, y dejándolo todo, lo siguieron (Lc 5,11)