San Esteban por Ermes Dovico

San Marcos de Aretusa

Ejerció su ministerio episcopal en la fase más candente de la controversia arriana

Santo del día 29_03_2020 Italiano English

Este santo fue obispo de Aretusa, la hodierna Ar-Rastan, en Siria. Ejerció su ministerio episcopal en la fase más candente de la controversia arriana y, durante algún tiempo, se sospechó que tenía una posición ambigua, debido tal vez a su debilidad de carácter. Con el paso de los años superó sus dudas doctrinales y hay testimonios que demuestran que hacía el año 360 había vuelto plenamente a la ortodoxia católica, profesando abiertamente lo que ha sido definido solemnemente como el Credo niceno.

Durante el breve reinado del emperador Julián el Apóstata (361-363), cuya intención era restablecer el paganismo, Marcos huyó de Aretusa pues temía por su vida, dado que había hecho destruir un templo pagano para construir una iglesia. Sin embargo, cuando supo que varios fieles que habían permanecido en la ciudad habían sido arrestados, volvió a Aretusa para estar cerca de las almas que le habían sido confiadas.

Fue encarcelado y torturado. Sus perseguidores se quedaron asombrados de la entereza con la que soportó su calvario, lo que le valió el título de «confesor de la fe», tal como refieren los antiguos menologios y sinasarios. Fue liberado y durante el resto de su vida (falleció en el año 364) se dedicó a la conversión de los paganos. El contemporáneo, pero más joven, san Gregorio Nacianceno, Doctor de la Iglesia, lo definió como «varón eximio y santísimo anciano».