Poner en duda
¿Con qué autoridad haces esto? (Mc 11,28)
Volvieron a Jerusalén y, mientras paseaba por el templo, se le acercaron los sumos sacerdotes, los escribas y los ancianos, y le decían: «¿Con qué autoridad haces esto? ¿Quién te ha dado semejante autoridad para hacer esto?». Jesús les replicó: «Os voy a hacer una pregunta y, si me contestáis, os diré con qué autoridad hago esto. El bautismo de Juan ¿era del cielo o de los hombres? Contestadme». Se pusieron a deliberar: «Si decimos que es del cielo, dirá: “¿Y por qué no le habéis creído?”. ¿Pero cómo vamos a decir que es de los hombres?». (Temían a la gente, porque todo el mundo estaba convencido de que Juan era un profeta). Y respondieron a Jesús: «No sabemos». Jesús les replicó: «Pues tampoco yo os digo con qué autoridad hago esto». (Mc 11,27-33)
Como ocurrirá seguidamente a lo largo de la historia, los que se oponen al Evangelio intentarán poner en duda la autoridad de Jesús y, después, la de sus discípulos mediante preguntas-trampa para hacerles caer en el error. A ellos no les interesa saber la respuesta, sea cual sea. Estemos atentos a no hacer lo mismo cuando las enseñanzas de Jesús no corresponden con nuestros deseos.