Los prejuicios sobre Dios
Y se escandalizaban a causa de él. (Mt 13,57)
Fue a su ciudad y se puso a enseñar en su sinagoga. La gente decía admirada: «¿De dónde saca este esa sabiduría y esos milagros? ¿No es el hijo del carpintero? ¿No es su madre María, y sus hermanos Santiago, José, Simón y Judas? ¿No viven aquí todas sus hermanas? Entonces, ¿de dónde saca todo eso?». Y se escandalizaban a causa de él. Jesús les dijo: «Solo en su tierra y en su casa desprecian a un profeta». Y no hizo allí muchos milagros, por su falta de fe. (Mt 13,54-58)
Los hombres tienen muchas maneras de justificar el hecho de no creer en Jesús. Esto es debido a un prejuicio negativo. Dios da a cada persona un alma dotada de inteligencia, que tiende a las verdades, y de voluntad, que tiende al bien. Cuando queremos decidir solos cuál es nuestro bien, la voluntad toma el control sobre la inteligencia que, de este modo, se vuelve ciega y es incapaz de reconocer las verdades, es decir Jesús mismo, como le ocurre a una buena parte de sus conciudadanos. Y tú, ¿te has quitado de encima todos los prejuicios sobre Dios que te alejan de Jesús?