La apariencia
El fariseo se extrañó (Lc 11, 38)
Una tentación común
Pide una señal, pero no se le dará más señal que la de Jonás (Lc 11, 29)
¿Dónde están los otros nueve?
¿No ha habido nadie, fuera de este extranjero, que volviera para dar gloria a Dios? (Lc 17, 18)
¡Dichosa la mujer que te llevó en su seno!
Dichosos todavía más los que escuchan la palabra de Dios y la ponen en práctica (Lc 11, 28)
Inmensamente amada
El Señor está contigo (Lc 1, 28)
Pidan y se les dará
Porque quien pide, recibe; quien busca, encuentra y al que toca, se le abre (Lc 11, 10)
Las siete peticiones
Señor, enséñanos a orar (Lc 11, 1)
El único Salvador
Se sentó a los pies de Jesús y se puso a escuchar su palabra (Lc 10, 39)
En necesidad de compasión
Cuida de él (Lc 10, 35)
Auméntanos la fe
Si tuvieran fe, aunque fuera tan pequeña como una semilla de mostaza... (Lc 17, 6)
El diablo vencido
Vi a Satanás caer del cielo como el rayo (Lc 10, 18)
Consecuencia inevitable
El que los escucha a ustedes, a mí me escucha; el que los rechaza a ustedes, a mí me rechaza (Lc 10, 16)