Santo Tomás por Ermes Dovico

FRAGMENTOS DEL EVANGELIO

¿Todavía es válido el Antiguo Testamento?

No he venido a abolir, sino a dar plenitud. (Mt 5,17)

«No creáis que he venido a abolir la Ley y los Profetas: no he venido a abolir, sino a dar plenitud. En verdad os digo que antes pasarán el cielo y la tierra que deje de cumplirse hasta la última letra o tilde de la ley. El que se salte uno solo de los preceptos menos importantes y se lo enseñe así a los hombres será el menos importante en el reino de los cielos. Pero quien los cumpla y enseñe será grande en el reino de los cielos». (Mt 5,17-19)


El corazón de la Ley divina es el amor a Dios (primeros tres mandamientos) y al prójimo (los otros siete). Siendo Dios mismo, amor, Jesús no puede querer la abolición de la Ley del amor. Obviamente, las prescripciones del Antiguo Testamento valen solo si son confirmadas por el Nuevo. Por esto no es necesaria ya la circuncisión y ya no es válida la prohibición de hacer imágenes de Dios, puesto que Él se ha hecho visible en el Hijo. Es decir, Jesús lleva a cumplimiento la antigua alianza. En lo que respecta a nuestro vivir cotidiano, ¿escuchamos atentamente lo que dice Jesús en el Evangelio y nos esforzamos en ponerlo en práctica? ¿O nos distraemos con otros intereses?