Una interpretación superficial
¿Cómo no sabéis interpretar el tiempo presente? (Lc 12,56)
Decía también a la gente: «Cuando veis subir una nube por el poniente, decís enseguida: “Va a caer un aguacero”, y así sucede. Cuando sopla el sur decís: “Va a hacer bochorno”, y sucede. Hipócritas: sabéis interpretar el aspecto de la tierra y del cielo, pues ¿cómo no sabéis interpretar el tiempo presente? ¿Cómo no sabéis juzgar vosotros mismos lo que es justo? Por ello, mientras vas con tu adversario al magistrado, haz lo posible en el camino por llegar a un acuerdo con él, no sea que te lleve a la fuerza ante el juez y el juez te entregue al guardia y el guardia te meta en la cárcel. Te digo que no saldrás de allí hasta que no pagues la última monedilla». (Lc 12,54-59)
Los signos del tiempo están muy presentes en aquellos que tienen fe en Jesús, es decir, los pobres de espíritu. Ellos, de hecho, están siempre atentos para poder interpretar a la luz del Evangelio todo lo que acontece, porque su deseo es cumplir la voluntad divina. Dios, de hecho, nos habla a través de los hechos y de las personas que nos encontramos en la vida, visto que nada sucede por casualidad. Y a nosotros, ¿nos interesa de verdad la voluntad de Dios, o tendemos a dar una interpretación superficial y solo terrenal de lo que pasa a nuestro alrededor?