Santa Teresa de Ávila por Ermes Dovico

FRAGMENTOS DEL EVANGELIO

Una hermosa sorpresa

Mirad el sitio donde lo pusieron (Mc 16,6)

Pasado el sábado, María Magdalena, María la de Santiago, y Salomé compraron aromas para ir a embalsamar a Jesús. Y muy temprano, el primer día de la semana, al salir el sol, fueron al sepulcro. Y se decían unas a otras:
– «¿Quién nos correrá la piedra de la entrada del sepulcro?»

Al mirar, vieron que la piedra estaba corrida, y eso que era muy grande.

Entraron en el sepulcro y vieron a un joven sentado a la derecha, vestido de blanco. Y se asustaron. Él les dijo:

– «No os asustéis. ¿Buscáis a Jesús el Nazareno, el crucificado? No está aquí. Ha resucitado. Mirad el sitio donde lo pusieron.

Ahora id a decir a sus discípulos y a Pedro: Él va por delante de vosotros a Galilea. Allí lo veréis, como os dijo».

(Marcos 16, 1-7)