Proyectos humanos y proyectos divinos

Mientras él hablaba estas cosas, aconteció que una mujer de entre el gentío, levantando la voz, le dijo: «Bienaventurado el vientre que te llevó y los pechos que te criaron». Pero él dijo: «Mejor, bienaventurados los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen». (Lc 11,27-28)

En nuestra vida, los proyectos humanos están llamados a encontrarse con los divinos. Para ser salvados, Dios pide escuchar la Palabra de Jesús y observarla constantemente en la obediencia. Preguntémonos si en los últimos días hemos escuchado la Palabra de Jesús, y si la hemos puesto en práctica concretamente.