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ECCLESIA

Orden de Malta, la revuelta de los profesos

Una dura carta de los profesos de la Soberana Orden Militar de Malta contra los intentos de imponer una reforma secularizadora de la orden es el último episodio de una guerra abierta que se libra desde 2017, cuando el Gran Maestre fue obligado a dimitir por el Papa.

Ecclesia 19_10_2020 Italiano English

Hay un aire de revuelta dentro de la Soberana Orden Militar de Malta (SMOM), que no tiene paz desde que en enero de 2017 el Papa Francisco destituyó al Gran Maestre Matthew Festing. Mientras permanece abierta la carrera por la elección del nuevo Gran Maestre, avanza el proyecto de reforma de los Estatutos de la Orden que ostenta el estrado y provoca fuertes tensiones.

En los últimos días hemos presentado en exclusiva los puntos clave del proyecto de reforma, que tiende a secularizar la Orden. Ahora la Brújula tuvo acceso a la carta de fuerte objeción que casi la mitad de los profesos (los que han hecho votos religiosos), enviaron al lugarteniente interino Fray Ruy Gonçalo do Valle Peixoto de Villas Boas y al Soberano Consejo. Según algunos rumores, la carta también llegó a algún dicasterio vaticano interesado en la cuestión (lee la carta AQUÍ).

A los convulsos asuntos internos de la Orden se sumó también el problema vinculado al cardenal Angelo Becciu, a quien el Papa Francisco obligó a dimitir como prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos el 24 de septiembre. Becciu en 2017 fue nombrado delegado pontificio para la Orden de Malta, superponiéndose a la figura del cardenal patrón Raymond Burke, que además nunca fue despedido formalmente, aunque lo pusieran “en pausa”.

En los comunicados oficiales sobre los cargos destituidos del cardenal Becciu no se menciona la Orden de Malta, pero se supone que ya no puede ocupar un cargo basado en la confianza que le dio el Papa. En este momento de lucha intestina viene también a faltar el interlocutor que pueda actuar como intermediario entre la Orden y la Santa Sede.

La carta, con fecha de septiembre de 2020, no hace referencia explícita al proyecto de reforma ya preparado, pero es claramente una reacción a éste. Los veinticinco signatarios, todos nombres importantes dentro de la Orden, incluido el ex Gran Maestre Mathew Festing, presentan los diez principios en los que debe basarse la “renovación de la Orden de Malta”, que los Caballeros de Justicia dan la bienvenida “calurosamente”, recordando al mismo tiempo que ellos mismos son “el corazón de la Orden”.

Énfasis no casual, porque el núcleo del conflicto es el intento de secularizar la Orden, reduciéndola a poco más que una organización no gubernamental (ONG). Es el proyecto llevado a cabo por el ala alemana liderada por el barón Albrecht von Boeselager, el actual Gran Canciller (en la práctica el Ministro de Asuntos Exteriores e Interior) que aprovechó esta transición para ampliar su poder.

Los profesos firmantes de la carta exigen el reconocimiento de su centralidad, pidiendo que no se pueda promulgar ninguna reforma sin su “aprobación final” y que sobre todo la renovación de la vida religiosa de los profesos “se lleve adelante sin la influencia indebida de quienes no son Caballeros de Justicia”. En este sentido, al sostenerse la necesidad de una renovación de la vida religiosa de la Orden, sin fallar en el carisma original, piden poder discutir aspectos individuales, que conciernen tanto a la vida fraterna como al camino de la profesión. Una forma, entre otras cosas, de hacer pesar el hecho de que otros estén decidiendo sobre estos aspectos.

En este sentido, también piden levantar el bloqueo sobre la aceptación de nuevas vocaciones (hay 12 solicitudes de ingreso a la vida religiosa de la Orden) y sobre la profesión de votos solemnes para quienes ya habían hecho votos temporales. Es un bloque que ha perdurado desde la “revolución” de 2017, que ya no tiene otro motivo que debilitar aún más el papel de los profesos dentro de la Orden de Malta.

Otros puntos se referían al papel de los profesos dentro de las asociaciones nacionales y la duración de los distintos cargos, pero sobre todo se reitera enérgicamente que “toda cuestión relativa a los profesos debe ser decidida por los propios profesos”. Y esto también de acuerdo con la norma del derecho canónico.

En definitiva, un verdadero frenazo a quienes están jugando sobre el futuro de la Orden, contradiciendo de hecho la referencia a la adhesión a la vocación religiosa originaria de la Orden, expresada en la carta del delegado pontificio (Cardenal Becciu) del pasado mes de julio. La incertidumbre sobre quién debería supervisar ahora el proceso de reforma en nombre del Papa solo hace que la guerra dentro de la Orden sea aún más pesada. Y ciertamente la carta de los profesos no será la última batalla.

La lista de los profesos firmantes:

 

1.   Frà Elie de COMMINGES

2.   Frà Karl PAAR

3.   Frà Matthew FESTING

4.   Frà John Edward CRITIEN

5.   Frà James-Michael von STROEBEL

6.   Frà Ian SCOTT

7.   Frà Pierre de BIZEMONT

8.   Frà Giovanni SCARABELLI

9.   Frà Luigi de PALMA

10. Frà Ludwig CALL

11. Frà Paul SUTHERLAND

12. Frà Julian CHADWICK

13. Frà Duncan GALLIE

14. Frà Emmanuel ROUSSEAU

15. Frà John T. DUNLAP

16. Frà Thomas MULLIGAN

17. Frà Alessandro de FRANCISCIS

18. Frà Nicolò CUSTOZA de CATTANI

19. Frà Richard J. WOLFF

20. Frà Philippe de BOUNAM de RYCHOLT

21.  Frà John EIDINOW

22. Frà Francis VASSALLO

23. Frà Nicola TEGONI

24. Frà Richard BERKLEY-MATTHEWS

25. Fra' Silvio Goffredo Martelli

26. Fra' Guy M. Lamy

27  Fra' Mathieu Dupont