Cristo Rey por Ermes Dovico

FRAGMENTOS DEL EVANGELIO

No hay paz sin verdad

¿Pensáis que he venido a traer paz a la tierra? No (Lc 12,51)

En ese tiempo, Jesús dijo a los apóstoles: «He venido a prender fuego a la tierra, ¡y cuánto deseo que ya esté ardiendo! Con un bautismo tengo que ser bautizado, ¡y qué angustia sufro hasta que se cumpla! ¿Pensáis que he venido a traer paz a la tierra? No, sino división. Desde ahora estarán divididos cinco en una casa: tres contra dos y dos contra tres; estarán divididos el padre contra el hijo y el hijo contra el padre, la madre contra la hija y la hija contra la madre, la suegra contra su nuera y la nuera contra la suegra».  (Lc 12,49-53)


Jesús no ama la división y el conflicto, pero desea por encima de todo que la Verdad sea anunciada. Dios quiere nuestro corazón, nuestro amor, pero no sin libertad, incluso la de rechazarle a Él, que nos ha creado y llenado de bienes. He aquí por qué, de manera momentánea y misericordiosa, Él parece no reaccionar ante comportamiento de los impíos. El deber de sus discípulos es el de continuar anunciando toda la Verdad, que es el mismo Cristo, a pesar de las divisiones existentes. Pensar que es bueno mirar lo que nos une en vez de lo que nos separa puede ser útil para decidir dónde pasar un fin de semana, pero no en las cuestiones importantes sobre fe o moral. No nos dejemos intimidar por la impopularidad que podría derivar del anuncio de la Verdad.