FORO

Disidentes cubanos dicen no al castro-comunismo

Un evento sin precedentes abrió el debate en Italia sobre la violación de los derechos humanos en Cuba, reuniendo las voces de oposición al régimen y denunciando la sólida red internacional que utiliza: “Si las democracias europeas financian la dictadura, alimentan la represión”. 

Internacional 02_02_2023 Italiano

Los cubanos libres se reunieron en Roma del 26 al 28 de enero, para participar en un evento sin precedentes en la capital italiana, el Foro “Democracia y Derechos Humanos para Cuba”. Una iniciativa de la asociación italiana “Las Guerreras Cubanas”, que no sólo logró reunir por primera vez a movimientos opositores al castro-comunismo de Italia, Alemania, Bélgica, España, Suiza y Estados Unidos; sino que además logró abrir el debate sobre la violación de los derechos humanos en el Parlamento Italiano, que fue sede de dos de los tres días de evento.  

El Foro fue posible gracias al apoyo del partido italiano Fratelli d’Italia, a través del senador Giuliomaria Terzi di Sant’Agata (presidente de la Comisión Política de la Unión Europea del Senado de la República), de los diputados Andrea Del Mastro y Alessandro Urzi, y de la coordinadora nacional del departamento de tutela de las víctimas de Fratteli d’Italia, Cinzia Pellegrino. Todos miembros de la fuerza política que ostenta la mayoría en la coalición de gobierno que sostiene a Giorgia Meloni. También colaboraron la Federación Italiana de Derechos Humanos (FIDU) y el “Global Comitee for the Rule of Law - Marco Panella”. 

“Es muy importante hablar en Europa y principalmente en Italia sobre la democracia que Cuba necesita”, dijo el primer día del evento el activista español Javier Larrondo, presidente de la ONG Prisoners Defenders, quien aprovechó la ocasión para presentar una radiografía de la situación de los derechos humanos en la isla: “Antes del 11 de julio del 2021, Cuba tenía un promedio de 150 prisioneros políticos entre periodistas y disidentes, y más de 11 mil personas estaban sentenciadas por tener una conducta contraria a la moral socialista. 4 mil condenados cada año”.  

Luego recordó los hechos del 11 de julio del 2021, cuando los cubanos alzaron su voz contra el régimen y recibieron una brutal represión que trajo consigo a más de 5 mil detenidos. “En este momento hay 1.057 personas con condenas o limitación de libertad, impuestas violando toda legalidad, incluso la cubana. En junio del año pasado el Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas publicó que más de 410 menores sufren prisión en Cuba, de los cuales 260 tienen entre 16 y 17 años, pero 150 tienen menos de 15 años”, recordó Javier Larrondo, leyendo el resumen del último informe de Prisoners Defenders.  

Pero, lo que sucede en Cuba no es algo casual o aislado. “Es una estrategia estudiada y ejecutada con el apoyo de fuerzas poderosas como Rusia, Irán y Venezuela, e incluso de China, que es aliada de Rusia desde hace mucho tiempo en contra occidente”, alertó el senador Giuliomaria Terzi di Sant’Agata. 

“Hay una red antidemocrática que se vincula con realidades autocráticas como las de Nicaragua y Venezuela, que no en vano son aliados de los Pasdarán y del Hezbolá iraní. Sabemos del triángulo con presencia de células del Pasdarán en América Latina, justo en las fronteras entre Venezuela, Colombia y Brasil”, aseguró el también ex ministro de relaciones exteriores de Italia; evidenciando que los países de América Latina están indefensos ante una red internacional que promueve el comunismo, justo en el marco de la conmemoración del Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto. 

“Tengo meses sin ver a mi hijo”; “a mis dos hijos los golpearon y torturaron juntos”; “mi pequeño se quiere suicidar porque no puede ver a su padre”; “he ido a todas las instituciones y nadie nos escucha”; fueron tan sólo algunos de los testimonios escuchados de los familiares de los cientos de presos políticos que participaron en el evento a través de video llamadas.  

Un padre de un prisionero político en Cuba, que no reveló su nombre para proteger su integridad, agradeció con un video a los presentes por permitir que se escuche su voz: “Vengo a decirle a los europeos que el delito más grande que hay en Cuba no es robar, el delito más grande que hay en este país es pedir libertad y por eso están nuestros hijos y nuestros hermanos presos, sólo por pedir libertad, por alzar su voz”, dijo.  

Resulta espeluznante escuchar en directo cada uno de los testimonios del holocausto cubano y luego saber que “cada año Italia aporta 30 millones de euros al régimen, a través de la red de asociaciones de izquierda”, denunció uno de los organizadores, Sadiel González Gutiérrez. “Si las democracias europeas siguen dando dinero a la dictadura castrista, se lo seguirá gastando en represión”, agregó. 

Por su parte, el diputado Alessandro Urzi aseguró sentirse decepcionado de la “incapacidad de la política italiana” para afrontar el problema de Cuba. “Uno de los debates más paradójicos a los que he asistido dentro del Parlamento italiano se refería a la contribución de Italia a Cuba para la provisión de una formación adecuada para las fuerzas policiales. Es decir, Italia, un país libre, entrenó las fuerzas de seguridad de un país en dictadura. ¡Insólito!”, indicó. 

Asimismo, la realidad cubana fue narrada por los cubanos libres que asistieron representados por más de diez organizaciones civiles: ODV XVII Diciembre y ODV “Democrazia e Libertà” de Italia, “Arte Magna International” y “Belgo Cuba” de Bélgica, “DeCub e.V” y “PatriayVida e.V.” de Alemania, “Cubanos por el progreso y la integración de Valencia” (CPiV) de España, el Partido Nacionalista Cubano (PNC), la Plataforma Internacional de derechos humanos en Cuba, la Asociación de Ex-Presos políticos y exilados Cubanos, CubaDemanda, Movimiento Constitucionalista Cubano C-40, entre otras.  

Pero, para el movimiento C-40, “el problema fundamental” de Cuba es el reconocimiento que le ha dado la comunidad internacional como Estado legítimo. “Este régimen es el resultado de la supuesta revolución del ‘59 que tampoco fue una revolución, que había prometido devolver la Constitución de 1940 y no lo hizo. La Constitución de 1940 fue usurpada con un golpe militar en el año 1952, se lucha contra ese tirano (Fulgencio Batista), se triunfa y entonces se le da la espalda a la Constitución y el mundo entero se calló la boca. No hubo una revolución en el año 1959, porque se pasó de una dictadura a otra dictadura. Y por alguna razón la comunidad internacional ha olvidado este detalle tan simple, que confirma que tenemos un gobierno ilegítimo que usurpa la soberanía popular”, dijo Gustavo Vigoa. 

Durante una de sus intervenciones, Cinzia Pellegrino aseguró que este foro también es una ocasión para que las instituciones italianas tengan información de primera mano sobre la verdadera situación cubana, para contrastar las manifestaciones en apoyo a la dictadura castrista que organizan algunos partidos de la izquierda italiana. “Deben entender la realidad no porque lo diga la derecha, sino porque lo dice la historia, los dicen los videos que vimos hoy, porque lo dicen todas las víctimas. Apoyar la causa de la dignidad de la persona no es una causa de derecha o de izquierda, es un derecho esencial. No entender esto y salir a la calle contra la dignidad de las personas es el mayor fracaso que ha podido cometer la izquierda”, expresó. 

Mientras que el llamado unánime es a una Italia más activa en la defensa de los derechos humanos de los cubanos y menos colaboracionista con el régimen. “Me gustaría imaginar una Italia que sea líder en Europa en la condena contra el régimen comunista de Cuba”, afirmó el diputado Andrea Del Mastro.  

Sin embargo, “oímos hablar vagamente de diálogo y de paz, pero no necesitamos un diálogo relativista”, dijo el senador Giuliomaria Terzi di Sant’Agata, quien concluyó su intervención con un llamado a la diplomacia de “guantes de seda” de Josep Borrell para que la Unión Europea “reconozca que la situación en Cuba está dramáticamente empeorando”.  

“Soñamos una Cuba libre, en donde no exista la frase ‘Patria, socialismo y muerte’ y podamos decir sin miedo ‘Patria y Vida’”, expresó Kenia Rodríguez del movimiento “Las Guerreras”.