La beatificación de Hernández lo arrebatará a los santeros

El comunicado de la Asociación Internacional de Exorcistas con críticas a la beatificación del venezolano José Gregorio Hernández por el uso que algunos ritos de la santería de América Latina hacen de su figura, ha generado una serie de artículos que crean confusión y que de alguna manera dañan la imagen de un hombre ejemplar como lo fue el “médico de los pobres”. Incluso algunos articulistas han cometido el error de relacionar la decisión del Papa Francisco de aprobar su beatificación con la polémica en torno a la Pachamama, cuando no tiene absolutamente nada que ver. Estas confusiones sólo hacen daño al pueblo católico venezolano (85% de la población, a la que pertenezco), que tiene mucha devoción por el Dr. Hernández y ha esperado con impaciencia esta noticia desde hace 71 años.

“La beatificación del Dr. José Gregorio Hernández no surge ‘ex nihilo’, por una decisión voluntarista del Santo Padre”, puntualizó taxativamente el cardenal Jorge Urosa Savino, arzobispo emérito de Caracas, al consultarle sobre tales críticas. Vale destacar que el cardenal fue vice postulador de la Causa de Hernández desde junio de 1984 y hasta mayo de 1990, y fue el principal responsable de la misma en su condición de arzobispo de Caracas desde noviembre de 2005 hasta julio de 2018.

A continuación, la conversación entre la Brújula Cotidiana y el cardenal Jorge Urosa Savino, para esclarecer cualquier duda…
“El Papa Francisco está actuando de forma muy seria y apropiada, de forma correcta, con firme base en toda una serie de elementos y argumentos sólidos reunidos a través de 70 años que confirman los méritos del virtuoso médico y científico venezolano para ser beatificado. El Papa está culminando solemnemente este largo y exitoso proceso. No lo inventa”.

¿Por qué el Dr. José Gregorio Hernández merece ser beatificado?
“Porque el Dr. José Gregorio Hernández, su vida y virtudes, ha sido estudiado profunda y exhaustivamente por gran cantidad de personas de Venezuela y fuera del país. Y todos coinciden en su magnífica estatura humana, sus grandes virtudes cívicas y cristianas, su gran conocimiento científico, así como su entrega generosa al servicio de sus pacientes y del pueblo venezolano en general, y la intensidad de su fe, su amor a Dios, y su viva y pública piedad religiosa. Por otra parte, los procesos de beatificación son muy serios y severos, y más aún el estudio minucioso de los presuntos milagros que se presentan a la consideración de la Congregación para las Causas de los Santos. De manera que la decisión de beatificar o no a un siervo de Dios es responsabilidad de muchísimas personas - no solamente del Romano Pontífice - que van coincidiendo y corroborando y aprobando sucesivamente los méritos y condiciones extraordinarias de los candidatos. El Sumo Pontífice simplemente confirma solemnemente con su suprema autoridad lo que muchas otras personas han determinado”.

¿Y Francisco no ha sido el único Papa en reconocer las virtudes del beato venezolano, correcto?
“Así es, dos Papas han coincidido en la seriedad de los estudios realizados y en la grandeza humana y religiosa del Dr. Hernández, rubricada por la Sagrada Congregación. Primero, San Juan Pablo II, que el 16 de enero de 1986 constató y decretó las virtudes heroicas y, por lo tanto, declaró Venerable al Dr. Hernández. Y ahora el Papa Francisco que aprobó su beatificación, luego del profundo estudio hecho por la Congregación para las Causas de los Santos que exige una severa comprobación de un auténtico milagro atribuido a la intercesión del Dr. Hernández”.

¿Qué opina sobre las preocupaciones de la Asociación Internacional de Exorcistas?
“Esa Asociación merece todo nuestro respeto. Y les aseguro que pueden estar tranquilos. ¡Por supuesto que los Obispos venezolanos deploramos y rechazamos que los brujos y espiritistas abusen indebida, abusiva e impropiamente de la fama de santidad del Dr. Hernández, y de su fama de poderoso intercesor ante Dios! ¡Eso está muy mal! Pero es algo externo, no intrínseco a la realidad de la persona, vida y virtudes del Dr. Hernández. Es como si se negara la capacidad o méritos de un gran equipo de futbol o de un campeón de Fórmula Uno por el hecho de que algunos de sus fanáticos sean delincuentes. O se menospreciara la capacidad profesional de un gran constructor por el hecho de que las autopistas que haga sean utilizadas por corruptos. Por eso la grandeza humana cristiana y religiosa del Dr. Hernández no es opacada por la falsedad del culto santero o de las prácticas espiritistas, ni depende de esas prácticas. Está sustentada en sus méritos y virtudes auténticamente comprobados. Son dos cosas totalmente distintas”.

“Por otra parte, el mal uso que indebidamente hagan brujos y espiritistas de la insigne figura del Dr. Hernández es nada en comparación con la recta devoción y apropiado y legítimo culto de millones de fieles, no solo en Venezuela, sino también en otros países de América Latina.  Además, en los meses previos a la beatificación, los Obispos venezolanos haremos una intensa labor de evangelización e información, y de nuevo rechazaremos frontalmente este mal uso del futuro beato.  De manera que la Asociación Internacional de Exorcistas puede estar tranquila”.

¿Y qué les dice a los críticos que han querido utilizar esta beatificación para atacar al Papa? 
“Que el Papa Francisco no está solo en esta beatificación. Lo repito: él simplemente ha recibido la debida y sólida información y ha acogido gustoso el trabajo, las investigaciones serias y muy severas de la Iglesia, primero en Caracas, durante más de 70 años, y luego en Roma también desde hace muchísimos años, sobre todo, después de enero de 1986. La Congregación para las Causas de los Santos es muy seria, estricta, cuidadosa y severa en el estudio de las informaciones de los Siervos de Dios que considera como candidatos para una posible beatificación y posterior canonización.  De manera que un Papa no beatifica ni canoniza a su arbitrio a una persona. El actúa respaldado por una sólida y prolongada suma de veredictos favorables de muchísimas personas doctas, serias y competentes sobre las virtudes y méritos de un determinado candidato. ¡Gracias, Papa Francisco!”.

La fama de santidad del Dr. José Gregorio Hernández en Venezuela es indiscutible, sin embargo, el proceso no ha sido sencillo…
“El Dr. Hernández es realmente una persona extraordinaria, de solidas virtudes, de gran estatura humana, y sus condiciones religiosas y su unión con Dios han sido rubricadas por el milagro recientemente aprobado por la severísima y muy profesional Junta Médica de la Congregación, por la Comisión de teólogos de la misma, y luego por la Comisión de Obispos y Cardenales que pertenecen a ese Dicasterio Romano. Y, sin duda, la devoción de los millones de venezolanos que han exultado de alegría por el anuncio de la aprobación del reciente milagro no es oscurecida ni debilitada por las pocas, falsas, sacrílegas y fraudulentas actividades de gente que no tiene nada que ver con la Iglesia. La beatificación ratificará las virtudes del gran Dr. Hernández y lo reivindicará como alguien perteneciente no a los brujos, ¡sino a la Santa Iglesia de Dios!”.